Las autoridades confirmaron el lunes otras 59 muertes de COVID-19, aunque el estado ha visto menos de 100 muertes durante tres días consecutivos y las métricas de los hospitales continúan mejorando en el área de Chicago.
Illinois ha visto tres días consecutivos en los que murieron menos de 100 personas. El sábado, se reportaron 74 muertes; el domingo, 51 muertos. La administración del gobernador J.B. Pritzker publicó la semana pasada proyecciones que predecían un rango diario de 50 a 150 muertes en junio o julio. Una institución de investigación predijo un rango de entre 50 y 300 muertes.
Según el Departamento de Salud Pública de Illinois, se han registrado 4,234 muertes por coronavirus en el estado desde que comenzó la pandemia. El estado también reportó 2,294 casos, elevando el conteo positivo total a 96,485. El estado recibió 21,290 pruebas el domingo.
Hay 4.120 personas en hospitales estatales diagnosticados con COVID-19, según el Dr. Ngozi Ezike, jefe del Departamento de Salud Pública de Illinois. De ellos, 1,096 estaban en terapia intensiva y 636 de esos pacientes están con ventiladores. Esos números significa una mejora desde el jueves por la noche, cuando 4,367 personas estaban en hospitales con COVID-19, 1,129 en terapia intensiva y 675 en ventiladores.
La tasa de positividad del estado (número de pruebas positivas sobre el total) es del 10.7%. En la región más afectada del estado, la región noreste, la tasa de positividad es del 17.9%.
El gobernador J.B. Pritzker ha vinculado cuatro regiones y sus tasas de positividad y métricas hospitalarias en su controvertido plan de reapertura. Todas las regiones del estado están en camino, bajo una tasa de positividad del 20%, a pasar a la fase tres de su plan después de que su orden extendida de quedarse en casa expire el 30 de mayo.
Esa fase permitirá que las fábricas no esenciales, otros negocios no esenciales, peluquerías, salones de belleza y pequeñas tiendas minoristas abran bajo orientación de normas de seguridad. Los bares y restaurantes permanecerían cerrados a excepción de la venta para entrega y envío a domicilio.
Durante el fin de semana, el gobernador demócrata recibió más protestas por la extensión de la orden de quedarse en casa, tanto fuera del Centro “James R. Thompson” en Chicago como también en Springfield. Y está luchando contra otros desafíos legales mientras la Asamblea General de Illinois regresará a Springfield el miércoles para tratar de aprobar un presupuesto y resolver otros problemas.
Algunos están molestos por una regla de emergencia que Pritzker presentó el viernes, en la que los dueños de negocios que desobedezcan la extensión de la orden de permanencia en casa del gobernador podrían ser acusados de un cargo menor. Pritzker dijo el lunes que la disposición ya estaba en la ley del Departamento de Salud Pública de Illinois y que prefería que los dueños de negocios recibieran advertencias antes de ser sancionados.
“Después del aviso de la policía o incluso después de una carta de cese y desistimiento, el estado puede revocar la licencia de licor del negocio o imponer una orden de cierre por parte de IDPA”, dijo Pritzker, citando como ejemplo a un bar o restaurante que no acate las reglas. “Ambas son medidas costosas para que un negocio regrese y nadie las prefiere, mucho menos yo”.
En cambio, dijo, basado en una regla de emergencia, pueden acusar al negocio de un delito menor de clase A. Lo ideal es que las empresas sigan la orden existente de quedarse en casa, lo que “causa menos daño a un negocio que un cierre total o la pérdida de una licencia”.
También el lunes, Pritzker anunció que el programa de rastreo del estado seguirá al mismo programa de Massachusetts al unirse a Partners in Health, una organización que ayudó a ese estado a ampliar su programa. El gobernador dijo que solo 29% de los casos de contagio conocidos en el Illinois han tenido seguimiento, mientras que el estándar es de más del 60%.
Una persona que pudo haber estado en contacto con alguien con COVID-19 primero recibirá un mensaje de texto. Si no responde, un rastreador los llamará tres veces. Como último recurso, el rastreador trataría de informarlos en persona, según explicó el epidemiólogo del estado, el Dr. Wayne Duffus, quien lidera el programa de rastreo.
El estado ha iniciado su programa piloto en los condados de St. Clair y Lake. Se enviaron evaluaciones a los 97 departamentos de salud locales del estado para comprender sus capacidades de rastreo. Pritzker quiere esas respuestas, y un plan, “en las próximas semanas” y quiere que los rastreadores sean contratados localmente. Los interesados en ser rastreadores de contacto pueden encontrar el formulario en dph.illinois.gov/COVID19.