El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) anunció el jueves que pospondría el inicio de su controvertida “Academia de Ciudadanos”, cuya inicio estaba programado para comenzar a finales de este mes en Chicago, con una duración de seis semanas.
Activistas que defienden los derechos de los inmigrantes calificaron el aplazamiento, motivado por la pandemia del coronavirus, como una victoria temporal.
Los abogados asociados con la Coalición de Illinois para los Derechos de los Inmigrantes y Refugiados (ICIRR) enviaron casi 1,000 correos electrónicos a ICE exigiendo que cancelara la academia, ahora re-programada para próxima primavera.
“Esta decisión de posponer la academia es definitivamente el resultado de la presión ejercida por muchas organizaciones, no sólo locales sino de todo el país”, dijo Rey Wences, de la organización Comunidades Organizadas contra las Deportaciones (OCAD).
ICE había dicho anteriormente que la academia seguiría el modelo de otras instituciones que enseñan la aplicación de la ley e incluiría una descripción general del historial de la inmigración, una demostración de la capacitación que atraviesan los oficiales de inmigración, un recorrido por una cárcel para inmigrantes detenidos e información sobre quienes supervisan los vuelos que transportan a los deportados. .
“La Academia de Ciudadanos también le brinda a ICE la oportunidad de escuchar a los participantes, comprender sus perspectivas y desacreditar mitos”, dijo ICE en un comunicado de prensa.
Pero los activistas criticaron a la academia como un ejemplo de supremacía blanca, alegando que generaría aún más miedo entre la comunidad inmigrante.
Los grupos defensores de los derechos de los inmigrantes en todo el país temían que después del lanzamiento de esa Academia en Chicago, otras academias fueran abiertas en otras ciudades, dijo Wences.
Los activistas pro-inmigración sí planean abrir el 15 de septiembre su “Academia del Pueblo”, destinada a contrarrestar el inicio de la academia de ICE, dijo Wences. Los defensores también han organizado seminarios web semanales, algunos de los cuales atraen a más de 100 participantes, para informar al público sobre cómo opera ICE.
“Creemos que este no es el momento para detenernos”, dijo Wences. “Esta es otra garantía de que nuestro movimiento puede tener un impacto”.