Los miembros de la comunidad de La Villita tuvieron una reunión el lunes para conmemorar el segundo aniversario de la demolición fallida por parte de Hilco Redevelopment Partners de una chimenea de casi 400 pies que cubrió a la comunidad con una espesa capa de tierra y polvo.
“Ese día realmente marcó a muchos de nuestros residentes; muchos todavía tienen profundas preocupaciones de salud pública”, dijo Edith Tovar, organizadora comunitaria de la Organización de Justicia Ambiental de La Villita (LVEJO, por sus siglas en inglés).
“¿Por qué permitirían que ocurriera una implosión durante COVID-19, una pandemia respiratoria?” preguntó, todavía incrédula.
Una bodega gigante operado por Target ahora se encuentra en el terreno que una vez ocupó la chimenea, que anteriormente había sido parte de una antigua planta de carbón Crawford Power Generation Station.
“La bodega es solo una continuación de la contaminación existente”, dijo Tovar, señalando la contaminación del aire adicional en el vecindario provocada por muchos camiones que van y venían de la bodega.
La reunión del lunes se llevó a cabo en la calle 33th y la avenida Harding, cerca del lugar de la implosión.
Los miembros de la comunidad instalaron un altar y le pusieron flores y otros objetos para conmemorar el evento. El altar también honró a Fernando Cantú, un hombre de 78 años que murió poco después de la demolición.
Los organizadores dijeron que Cantú tenía asma y COPD, y es posible que las partículas tóxicas agravaron su sistema respiratorio y precipitaron su muerte.
“Lo más importante es no olvidar que nosotros también somos contribuyentes y contribuimos al presupuesto de la Municipalidad, no solo los grandes desarrolladores. Tómenos en consideración. Tenemos los mismos derechos y no queremos contaminadores en nuestra comunidad”, dijo la activista comunitaria Irma Morales.
El grupo le pidió a la alcaldesa Lori Lightfoot que publique el reporte de investigación completo sobre el incidente realizado por el inspector general de la ciudad, que hasta ahora solo se ha resumido brevemente ante el público.
El concejal Michael Rodríguez estaba fuera de la ciudad y no asistió a la reunión, pero dijo por teléfono el martes que todavía está presionando para que se haga una audiencia para discutir el reporte y el por qué no se ha hecho público.
“Presenté una resolución solicitando esto y espero obtener una audiencia de inmediato”, dijo.
Varios meses después de la demolición fallida, Hilco Redevelopment Partners, la compañía que derribó la planta de carbón para dar paso al nuevo almacén, y dos contratistas acordaron pagar $370,000 para resolver una demanda presentada por el estado por violaciones de contaminación del aire.
La compañía y un par de contratistas, MCM Management Corp y Controlled Demolition, debían pagar el dinero a Access Community Health Network como parte de su acuerdo con el Fiscal General de Illinois, Kwame Raoul. Access opera clínicas y sirve a La Villita.
El reporte del inspector general también pedía el despido de un funcionario de salud de la ciudad que no pudo evitar la implosión fallida. Sin embargo, el funcionario recibió una reprimenda por escrito.
El inspector general también recomendó disciplinar a dos funcionarios del Departamento de Edificios, pero ninguno recibió castigo alguno.
