Estrena película biográfica de Richard Montañez y los ‘Flamin’ Hot Cheetos’

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La película “Flamin’ Hot” de Eva Longoria es una biografía medio cursi pero bien hecha, aunque demasiado convencional que relata la historia de la pobreza a la riqueza de Richard Montañez, un trabajador de mantenimiento en la empresa Frito-Lay que inventó los mundialmente populares Flamin’ Hot Cheetos, cambiando para siempre el juego de la comida chatarra.

Pero la cuestión es si Montañez verdaderamente fue el inventor de los Flamin’ Hot Cheetos o no.

Searchlight Pictures presenta una película dirigida por Eva Longoria y escrita por Lewis Colick y Linda Yvette Chávez, basada en un libro de Montañez. Duración: 129 minutos. Clasificada PG-13 (por algo de lenguaje fuerte y mención breve de las drogas). Está disponible el viernes en Hulu y Disney+.

Basado en el libro de Montañez, “A Boy, a Burrito and a Cookie: From Janitor to Executive”, con un guión de Lewis Colick y Linda Yvette Chávez, “Flamin’ Hot” a menudo se siente como una película biográfica hecha para la televisión, aunque la directora Longoria agrega algunos detalles visuales divertidos de vez en cuando, por ejemplo, una secuencia que señala el paso de casi una década con algunos gráficos ingeniosos mientras la cámara recorre un almacén.

Según otras versiones, él no fue el inventor. Montañez escribió dos libros sobre sus experiencias y se convirtió en un orador motivacional muy solicitado, pero como reportó Los Angeles Times en 2021, una investigación interna de Frito-Lay reveló que si bien el ascenso de Montañez en la empresa es admirable, y la empresa PepsiCo ha aplaudido su excelente carrera, él supuestamente tuvo poca o ninguna participación en la creación de la línea de productos Flamin’ Hot.

Todos sabemos que prácticamente todas las películas biográficas que se han hecho, incluyendo “La red social” (sobre la creación de Facebook), tienen libertad creativa y, a menudo, se toman grandes libertades con la verdad, desde personajes compuestos hasta lapsos de tiempo comprimidos y conversaciones reproducidas, es raro que toda la base de una película sea “inspirada por una historia real” en cuestión.

Pero si superamos ese dato, “Flamin’ Hot”, al igual que su tema, ofrece algunos momentos de satisfacción, pero en su mayoría son “calorías vacías”, con el personaje principal (interpretado con considerable encanto por Jesse García) ofreciendo algunas frases motivaciones.

Después de un prólogo extenso en el que vemos al joven Richard siendo víctima del “bullying” en un campo de trabajo para inmigrantes en Guasti, California, y luego cometiendo delitos menores cuando era joven (“Cuando el mundo te trata como un criminal, te conviertes en uno”, dice), le promete a su esposa embarazada, Judy (la maravillosa Annie González), que encontrará un buen trabajo, a pesar de tener poca educación.

Eventualmente lo contratan como conserje en la planta de Frito-Lay en Rancho Cucamonga, donde soporta los insultos y la actitud desdeñosa del gerente de la planta (Matt Walsh) mientras busca la tutela de Clarence (Dennis Haysbert), un ingeniero autodidacta que es una especie de leyenda en la planta. (El set del almacén es impresionante y expansivo).

Richard tiene una gran idea cuando se da cuenta de que la línea de Frito-Lay tendría mucho más atractivo en la comunidad latina si se agregara un poco de condimento de chile, o algo más. Solicita la ayuda de su esposa e hijos como grupo de enfoque, logra llamar la atención del director ejecutivo de la empresa, Roger Enrico (Tony Shalhoub), con su presentación e incluso recluta a algunos pandilleros locales amigables para ayudar a distribuir bolsas de papas fritas en toda la comunidad.

De vez en cuando, Richard reconoce verbalmente que lo que estamos viendo en la pantalla no es exactamente cómo sucedieron las cosas, pero refiriéndose a detalles relativamente menores. “Flamin’ Hot” nunca deja en duda que fue Richard Montañez quien inventó los Flamin’ Hot Cheetos, con un poco de ayuda de sus amigos y familiares.

Los hechos conocidos de la vida y la época de Richard Montañez son bastante notables. Realmente ascendió de una educación humilde a un trabajo de planta literalmente para eventualmente convertirse en vicepresidente de ventas multiculturales y promociones comunitarias. Aún así, incluso si Richard hubiera sido el único inventor de Flamin’ Hot Cheetos, la película “Flamin’ Hot” carece de suficiente entusiasmo para ser memorable.