El ex concejal de Chicago, Ambrosio Medrano, condenado tres veces por escándalos de corrupción, salió de prisión la semana pasada como parte de los esfuerzos por liberar a reclusos que corren riesgo de contraer coronavirus.
Los registros de la Agencia Federal de Prisiones muestran que Medrano fue asignado a una residencia de la oficina de administración de prisión en el área de Chicago. Gal Pissetzky, el mismo abogado que defendió a Medrano cuando fue sentenciado en una corte federal hace seis años, dijo que el político se encuentra en un centro de rehabilitación.
Pero para el resto del tiempo de cumplimiento de la sentencia de Medrano, Pissetzky explicó que ”él estará en prisión domiciliaria”. La fecha oficial de liberación de Medrano sería hasta el 14 de septiembre de 2025, según muestran los registros de la prisión.
Un portavoz de la Oficina de Prisiones dijo que el traslado de Medrano se hizo el miércoles pasado, siendo transferido a “confinamiento comunitario” desde la prisión federal en Duluth, Minnesota.
Pissetzky dijo que los funcionarios de la prisión identificaron a Medrano, de 66 años, como alguien que cumplía con los criterios de liberación compasiva en medio de la pandemia de coronavirus. Medrano nunca hizo ningún trámite ante la Oficina de Prisiones buscando una transferencia.
A principios de 2014, dos jueces federales que encabezaron casos separados sentenciaron a Medrano por un total de 13 años de prisión por actos de corrupción, que implicaba la aceptación de múltiples sobornos a cambio de favores.
Después de haber recibido una sentencia de dos años y medio en la década de los ‘90 por aceptar sobornos en el Consejo de la Ciudad de Chicago, un juez federal le dijo a Medrano que había logrado una “triple corrupción sin precedentes”.
El ex comisionado del condado de Cook, Joseph Mario Moreno, otro de los acusados en uno de los casos de Medrano, también busca la liberación compasiva debido al coronavirus. Moreno está condenado hasta enero de 2024.
La ex directora ejecutiva de las Escuelas Públicas de Chicago, Barbara Byrd-Bennett, ganó también la liberación anticipada de la prisión debido al coronavirus la semana pasada, siendo trasladada de una prisión en Virginia Occidental a un confinamiento domiciliario en Ohio. Su sentencia termina oficialmente en junio de 2021.