Después de ser relativamente desconocido y lograr llegar a la segunda vuelta de las elecciones para alcalde, Brandon Johnson necesitaba consolidar los votos afroamericanos que obtuvo la alcaldesa Lori Lightfoot y Willie Wilson, además de aprovechar el apoyo de los progresistas cerca del lago y evitar que Paul Vallas hiciera grandes avances entre los latinos.
Johnson es el alcalde electo hoy día porque ejecutó esa estrategia a la perfección.
Ganó 29 de 50 distritos políticos, y arrasó con los distritos de mayoría afroamericana. Ganó seis distritos de mayoría hispana frente a los nueve de Vallas. Los distritos latinos que se llevó Johnson incluyeron el distrito 22 que es el hogar del ex aspirante a alcalde Jesús “Chuy García, el congresista de La Villita que después respaldó a Johnson.
Y el impacto de Vallas en los nueve distritos latinos que ganó se vio muy afectado por la anémica participación. Eso fue impulsado, en parte, por tan pocos distritos latinos, solo el 10, el 30 y el 36, que también tuvieron una segunda elección para los concejales, lo que ayuda a atraer a más votantes. En el distrito 14 del lado suroeste, donde ya se decidió la carrera de concejal, solo se emitieron 4,283 votos en total.
Mientras Vallas no alcanzaba los grandes números que necesitaba en los distritos hispanos, Johnson aumentaba su total de votos a lo largo de la orilla del lago y acumulaba grandes victorias en los distritos predominantemente negros después de no ganar ninguno de los distritos de mayoría afroamericana en las elecciones de febrero.
El comisionado del Condado de Cook pasó la marca del 80% en ocho distritos afroamericanos: el 6, 8, 16, 17, 20 y el 21, en el lado sur y el 24 y 37 en el lado oeste. El residente de Austin obtuvo su porcentaje más alto, el 84.2 %, en el distrito 24.
Johnson selló su victoria al aumentar su total de votos a lo largo de la orilla del lago hacia el norte con votantes de mentalidad progresista, el corredor hipster de Milwaukee Avenue, y en tres distritos del lado noroeste con mayorías hispanas, dos de ellos representados por socialistas demócratas latinos: el 33 y el 35.
“Brandon Johnson ejecutó el típico libro de jugadas inteligente en la política de Chicago. Unió a los votantes negros con los liberales de la orilla del lago”, dijo el veterano estratega demócrata Tom Bowen, quien dirigió las campañas de segunda vuelta de Lightfoot en 2019 y 2023 y se desempeñó como subdirector de campaña de Rahm Emanuel en 2011 y director político durante la primera mitad del primer mandato de Emanuel.
“Un par de distritos que me llamaron la atención fueron 21, 17, 7, los distritos negros socioeconómicos más difíciles. Si hubiera habido un deterioro en la coalición de Brandon, ahí es donde lo esperaría porque esas personas son muy sensibles económicamente. También quieren una mayor presencia [policial]. Pero, obviamente, no aceptaron el argumento de Vallas de que los planes económicos y de seguridad pública de Johnson serían malos para ellos”.
El veterano estratega demócrata Peter Giangreco dijo que Vallas necesitaba ganar “del 25 al 30%” del voto negro para contrarrestar “lo bien que le estaba yendo a Brandon con los progresistas blancos, pero solo obtuvo el 20 [%]” porque sus propias palabras de que él es “más republicano que demócrata” lo persiguieron.
“Si Paul Vallas se hubiera presentado más como un demócrata tipo Joe Biden, le habría ido mejor en la comunidad negra y sería alcalde”, dijo Giangreco.
“Intentó rehacerse como demócrata en sus anuncios, y la gente en los lados sur y oeste no le creyeron. Brandon hizo un mejor trabajo alejándose de la postura de quitarle fondos [a la policía] que Vallas de ser republicano. Eso fue lo decisivo”.
