Los ex empleados del Signature Room compartirán $1.5 millones en sueldos atrasados y beneficios después de que un juez federal dictaminó que el operador del famoso restaurante y salón cerró en septiembre sin previo aviso.
Unite Here Local 1, que representa a los 132 trabajadores del Signature Room en el antiguo edificio John Hancock, celebró la victoria el jueves por la tarde afuera del lugar en la esquina sureste de North Michigan Avenue y Delaware Place. Los trabajadores cortaron un pastel decorado asemejando la orden judicial, junto con las palabras "¡Se hizo justicia!”.
“Cuando Signature Room cerró el año pasado, el sindicato se comprometió a buscar todas las vías para obtener justicia para estos trabajadores, y esta sentencia es un importante paso adelante en ese camino”, dijo Karen Kent, presidenta de Unite Here Local 1.
Unite Here dijo en una demanda en octubre pasado que el empleador no avisó con 60 días de anticipación sobre un cierre o un despido masivo, violando la ley estatal. El sindicato presentó la demanda contra Infusion Management Group, el operador del restaurante.
La denuncia alega que los trabajadores fueron notificados del cierre en un correo electrónico enviado a las 6 a.m. el 28 de septiembre, el día en que el restaurante y salón cerraron sus puertas. La demanda pedía que los trabajadores recibieran sueldo, cobertura de seguro médico y otros beneficios durante 60 días, según la Ley estatal de Notificación de Ajuste y Reentrenamiento de Trabajadores, conocida como Ley WARN.
El 14 de marzo, el juez de distrito estadounidense Harry Leinenweber ordenó a Infusion Management Group pagar a los ex empleados $1.5 millones en sueldos atrasados y beneficios y $22,725 en honorarios de abogados. La cantidad distribuida a cada empleado depende de su sueldo y número de horas que hubiera trabajado en esos 60 días.
Los abogados de Infusion Management Group no estuvieron disponibles de inmediato para hacer comentarios.
Unite Here dijo que la inmensa mayoría de los trabajadores son personas de color que trabajaron como cocineros, meseros, camareros y conserjes. Un tercio de ellos había trabajado en Signature Room durante 15 años o más y ocho celebraron su 30º aniversario de trabajo el verano pasado.
Bob Sorenson, que trabajó en Signature Room durante más de 25 años, dijo que se sorprendió cuando recibió la notificación del cierre repentino. Encontrar empleo “no ha sido un camino fácil” y todavía está buscando.
“Francamente, esperaba que se abriera algo en un lugar tan hermoso e icónico, que se abriera algo allí y que volviéramos al lugar en el que trabajamos durante décadas”, dijo.
Los trabajadores realizaron una manifestación en diciembre, pidiendo a los futuros inquilinos del espacio que los volvieran a contratar. Presentaron una petición que obtuvo 1,000 firmas de quienes prometieron no patrocinar el lugar a menos que los ex trabajadores fueran recontratados.
Ronald Gorny trabajó como mesero en el Signature Room durante 23 años, donde recordaba haber conocido a clientes habituales de todo el mundo. Dijo que el cierre complicó su vida.
“Fue muy estresante, por supuesto, no saber cómo será el futuro para uno y perder sus beneficios de salud”, dijo Gorny.
Al igual que Sorenson, dijo que buscar empleo ha sido una lucha. Gorny dijo que podría mudarse a Nashville para estar con su familia.
“En un año cumpliré 60 años”, dijo Gorny. “Es una historia completamente diferente salir al mercado laboral y buscar trabajo cuando eres mayor, aunque tengo la experiencia”.
Gorny describió a los empleados del Signature Room como una “familia unida”. La gente se unió para responsabilizar al operador del restaurante, dijo.
“Esta victoria es enorme. Significa mucho para todos nosotros”, dijo Gorny. “Estamos teniendo justicia por lo que debería haberse hecho correctamente, para empezar”.
