Mientras los funcionarios de Chicago se esfuerzan por encontrar refugio y soluciones para miles de migrantes que necesitan vivienda y empleo, grupos en St. Louis, Missouri, buscan trasladar a algunos de esos solicitantes de asilo allí, modelado en esfuerzos similares con refugiados afganos en años recientes.
El Instituto Internacional de St. Louis, una organización sin fines de lucro, está trabajando con sindicatos y líderes filantrópicos para posiblemente reasentar a miles de migrantes latinoamericanos en su ciudad para reforzar la fuerza laboral de St. Louis y frenar el descenso de su población.
“Podría ser el potencial para una gran relación entre ambas ciudades”, dijo Karlos Ramírez, vicepresidente de alcance latino del instituto. “Si los [migrantes] van a estar en un lugar mejor, St. Louis estará en un mejor lugar y Chicago estará en un mejor lugar. Creo que todos ganan”.
Ramírez dijo que el programa sería financiado principalmente por donantes privados y proporcionaría vivienda por hasta tres meses, teléfonos celulares, programas de aprendizaje y colocación laboral a través de sindicatos y asistencia de abogados de inmigración.
Agregó que los funcionarios de St. Louis están “muy al tanto y de acuerdo con esta iniciativa”, señalando que la alcaldesa Tishaura Jones creó recientemente una Oficina de Nuevos Americanos.
Ramírez manejó hasta Chicago el fin de semana pasado para evaluar las necesidades de los migrantes. Dijo que se reunió el lunes con Beatriz Ponce De León, la jefa adjunta de derechos de inmigrantes, migrantes y refugiados de Chicago, quien está encabezando una delegación de visita a la frontera de Texas.
Ramírez dijo que compartirá información con organizaciones asociadas y creará un volante para que las agencias de Chicago lo distribuyan entre los migrantes. Dijo que su organización buscará documentación de los solicitantes de asilo a través del programa de libertad condicional de Biden, que el mes pasado aceleró las visas de trabajo para más de 500,000 migrantes en Estados Unidos.
Ramírez dijo que su grupo y los funcionarios de Chicago están “siendo cautelosos y estratégicamente intencionales. Quiero tener cuidado de no recibir de repente una avalancha de [migrantes] sin hogar de Chicago y luego crear una situación de desamparados en St. Louis”.
El Instituto Internacional tiene camas y apartamentos listos para los primeros ocho migrantes que lleguen de inmediato, dijo Ramírez.
Dijo que el plan inicialmente era reasentar a personas de diferentes ciudades de Estados Unidos, pero que se está inclinando a enfocarse en Chicago debido a la gran cantidad de migrantes en la ciudad y porque la capacidad de Chicago para albergarlos se ha visto limitada.
La Iniciativa de Alcance Latino sigue el modelo de un programa similar de los últimos años para llevar refugiados afganos a St. Louis, dirigido por Jerry Schlichter, un abogado y líder cívico allí. Schlicther inició ese esfuerzo después de ver cómo el reasentamiento de refugiados bosnios en St. Louis en la década de 1990 reforzó la población y creó una comunidad vibrante.
Hace dos años, Schlichter inició un programa para traer afganos a su ciudad. Hoy, casi 2,000 refugiados afganos se han establecido en St. Louis, han encontrado empleos y han iniciado negocios y organizaciones culturales, dijo.
Ahora espera hacer lo mismo con los inmigrantes latinoamericanos. No especificó cuánto él y otros han donado al programa, solo describió la cantidad como “sustancial”.
Schlichter dijo que, como en muchas ciudades, St. Louis está experimentando escasez de mano de obra.
“Hay una enorme necesidad de empleados”, y las empresas de construcción, cadenas de supermercados, restaurantes y plantas de fabricación luchan por encontrar trabajadores mientras la población de la región sigue estancada.
“Si nos fijamos en las ciudades que están creciendo en todo el país, se trata principalmente de inmigrantes e hijos de inmigrantes”, dijo Schlichter. “Eso es lo que estamos tratando de construir aquí: aumentar nuestra población, hacer un St. Louis más vibrante y más diverso, lo cual es un beneficio para todos”.
Traducido por La Voz Chicago
