Ex policía de Chicago Jason Van Dyke sale de prisión, exigen cargos federales

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El exagente de la Policía de Chicago Jason Van Dyke fue liberado el jueves por la mañana tras cumplir tres años de prisión por el asesinato del joven Laquan McDonald en 2014, mientras activistas y funcionarios calificaron su liberación como una “decepción” y presionaron a los fiscales federales para que presenten nuevos cargos.

Van Dyke cumplió menos de la mitad de una condena de 81 meses por el asesinato de McDonald, de 17 años, en un tiroteo en el lado suroeste de la ciudad.

Van Dyke fue liberado a las 12:15 a.m. del Centro Correccional de Taylorville en las afueras de Springfield, según la portavoz del Departamento Correccional de Illinois, Lindsay Camile..

Van Dyke fue el Primer oficial de policía de Chicago en casi 50 años en enfrentar un cargo de asesinato por un asesinato. Su sentencia de 81 meses fue dictada después de su condena en 2018 por asesinato en segundo grado y 16 cargos de agresión agravada, uno por cada bala que disparó a McDonald, de 17 años.

La abuela de McDonald, Tracey Hunter, dijo que no pudo dormir la noche anterior. Aunque su familia se había estado preparando para este día, Hunter dijo que ha sido difícil entender que el hombre que mató a su nieto está libre.

“Las palabras no pueden expresar y explicar los sentimientos por los que está pasando toda mi familia”, dijo Hunter al Sun-Times. Ella dijo que su hija, la madre de McDonald, está “sin palabras”.

La fiscal estatal del Condado de Cook, Kim Foxx, respondió a la liberación de Van Dyke diciendo que la sentencia “no corresponde con el crimen” y animando a presentar nuevos cargos a nivel federal.

“Si existe la posibilidad de hacer algo al respecto a nivel federal, entonces, por todos los medios, debería hacerse algo”, dijo Foxx en un comunicado el jueves.

“Sugiero, y espero y rezo... que todos aquellos que tienen el poder de asegurarse de que haya responsabilidad por la muerte de Laquan McDonald hagan todo lo que esté en sus manos para que se rindan cuentas”, dijo Foxx, cuya oficina no procesó el caso de Van Dyke.

La vicegobernadora Juliana Stratton también instó al Departamento de Justicia de Estados Unidos a actuar ante cualquier posible violación de los derechos civiles. “Repito: Laquan McDonald debería estar vivo hoy. Su vida importaba”, escribió Stratton en Twitter.

La alcaldesa Lori Lightfoot emitió un comunicado similar en el que calificó de “decepción” la liberación de Van Dyke después de tres años.

“Sé que algunos habitantes de Chicago siguen descepcionados y molestos por la sentencia de Jason Van Dyke por el asesinato de Laquan McDonald”, dijo Lightfoot. “Como dije en su momento, aunque el jurado llegó al veredicto de culpabilidad correcto, la decisión del juez de condenar a Van Dyke a sólo 81 meses fue y sigue siendo la mayor decepción”.

“Entiendo que esto siga pareciendo un error judicial, especialmente cuando muchos hombres negros y latinos son condenados a mucho más tiempo de prisión por haber cometido delitos mucho menores. Son estas distorsiones en el sistema de justicia penal, históricamente, las que han hecho tan difícil construir la confianza”, dijo Lightfoot.

Aunque su liberación puede ser decepcionante, dijo Lightfoot, el enjuiciamiento de Van Dyke representa un avance en la reforma del sistema de justicia penal.

“Esta acusación condujo a reformas históricas, incluyendo una amplia legislación que creó el primer organismo de supervisión policial comunitario de Chicago, y un decreto de consentimiento para supervisar la reforma del CPD”, dijo Lightfoot.

La presidenta de la Junta del Condado de Cook, Toni Preckwinkle, dijo: “Nos vemos de nuevo forzados a reconocer este grave error judicial y las omnipresentes desigualdades construidas en nuestro sistema de justicia penal.”

“Aunque el hecho de que Van Dyke fuera condenado fue un paso en la dirección correcta, su corta sentencia está en desacuerdo con los miles de negros y latinos que están tras las rejas por delitos no violentos”, dijo Preckwinkle en un comunicado. “Y en los años siguientes al asesinato de Laquan, hemos perdido a más jóvenes negros y latinos a manos de la policía. Hoy rezo por la paz de la familia McDonald y sigo decidida a crear un sistema de justicia penal que sea verdaderamente justo y equitativo.”

Van Dyke, de 43 años, se negó a apelar a su condena al año de cumplirla porque quería cumplirla y evitar más atención.

Van Dyke, que fue golpeado por reclusos en una prisión federal de Danbury, Connecticut al principio de su condena, ha pasado desde entonces gran parte de su tiempo tras las rejas en aislamiento y ha sido trasladado repetidamente entre prisiones.

Los activistas tienen previsto reunirse el jueves por la tarde en la Plaza Federal de Chicago para instar a los fiscales federales a que presenten nuevos cargos.

Van Dyke cumplirá tres años de libertad supervisada, equivalente a la libertad condicional, que requerirá controles ocasionales con un funcionario de la corte. Dondequiera que viva en Illinois, también tendrá que dar información a su departamento de policía local para el Registro de Delincuentes Violentos contra los Jóvenes del estado, que normalmente haría que información como su dirección esté disponible en una base de datos pública.