Matan a niño de 3 años en el lado suroeste durante un tiroteo en la carretera

El niño asesinado, identificado como Mateo Zastro, es una de las víctimas más jóvenes de la violencia en Chicago este año.

SHARE Matan a niño de 3 años en el lado suroeste durante un tiroteo en la carretera
Mateo Zastro, 3, was fatally shot on the Southwest Side in a road rage attack, according to Chicago Police.

Mateo Zastro, de 3 años, recibió un disparo mortal en el lado suroeste en un ataque de ira en la carretera, según la Policía de Chicago. | Cortesía

El mejor lugar para cobertura bilingüe de noticias y cultura latina en Chicago. | The place for bilingual coverage of Latino news and culture in Chicago.

Read in English

En un tiroteo que, según la policía, fue provocado por la ira en la carretera, un niño de 3 años de Chicago fue asesinado el viernes por la noche en el lado suroeste mientras estaba sentado en el asiento trasero del vehículo deportivo de su madre.

El niño asesinado, identificado como Mateo Zastro, es una de las víctimas más jóvenes de la violencia en Chicago este año.

Su madre y los otros tres niños salieron ilesos de la ráfaga de disparos desatada desde otro carro en la cuadra 4400 de al oeste de Marquette Road en West Lawn, según la Policía de Chicago.

El comandante de la policía, Brian Spreyne, dijo que el ataque se derivó de un “incidente de ira en la carretera” que involucró a la madre y a otro vehículo que comenzó en la Avenida Cicero, aunque no estaba claro cómo se inició.

Nadie ha sido detenido.

Mateo Zastro, 3.

Mateo Zastro, de 3 años. | Cortesía

Spreyne dijo que Mateo iba en el carro con su madre y otros niños justo antes de las 8:40 p.m. el viernes, cuando un pasajero masculino en el asiento trasero de un coche rojo—posiblemente un Dodge Charger o un Ford Mustang—comenzó a disparar.

El niño recibió un disparo en la cabeza y murió unas ocho horas más tarde en el Centro Médico Cristo en Oak Lawn, según la Oficina del Médico Forense del Condado de Cook.

El tiroteo ocurrió cerca de la casa de Mateo.

La madre del niño trató de alejarse del otro coche, dijo Spreyne, pero éste la siguió de cerca.

“Quiero ofrecer nuestras profundas condolencias a la familia de este precioso niño de 3 años”, dijo Spreyne. “Nuestros corazones están rotos por el acto de violencia sin sentido que se llevó la vida de este niño”.

Contactada por teléfono el sábado, la madre de Mateo no quiso hablar con un periodista.

The intersection of West Marquette Road and South Kenneth Avenue in the West Lawn neighborhood is seen, Saturday, Oct. 1, 2022.

Se ve la intersección de Marquette Road y Kenneth Avenue en el barrio de West Lawn, el sábado 1 de octubre de 2022.

Pat Nabong/Sun-Times

Roger Ramírez, que vive cerca de donde se produjo el tiroteo, dijo el sábado que estaba cerrando las cortinas en su sala cuando sucedió el tiroteo. Ramírez, que se agachó hasta que pararon los disparos y escuchó que los coches se alejaron a toda velocidad, dijo que hubo varios disparos; una bala, al parecer perdida, impactó el marco de una ventana de su casa.

Los cristales rotos de la ventana de un coche quedaron sobre la intersección entre la calle Marquette y la avenida Kenneth.

“Es muy triste ver cómo se agravó la situación y mató a ese niño”, dijo Ramírez. “Me mudé aquí hace poco porque pensé que era un vecindario seguro”.

A bullet hole in the window frame of a house near Marquette Road and Kenneth Avenue in the West Lawn neighborhood.

Un impacto de bala en la ventana de una casa cerca de Marquette Road y Kenneth Avenue, en el vecindario de West Lawn.

Pat Nabong/Sun-Times

Ismael Fernández, que también vive cerca, dijo que al principio se oyó como un accidente de coche, lo que, según él, no es raro en ese tramo de Marquette Road. Pero luego escuchó más disparos y corrió a ver cómo estaban sus ancianos padres.

“Esto nunca pasa aquí en los 20 años que mis padres y yo llevamos en esta casa, no ha pasado algo así”, dijo Fernández.

La madre de Mateo se alejó del lugar donde se produjo el tiroteo antes de pedir ayuda a los agentes, según las transmisiones de radio de la policía, que muestran que un agente identificó rápidamente el tiroteo como un caso de furia en la carretera.

Los servicios de radio emitieron por primera vez una alerta a las 8:38 p.m. sobre un posible tiroteo cerca de las calles Marquette y Kenneth. El sistema de detección de disparos ShotSpotter de la policía indicó que se habían efectuado 10 disparos de gran capacidad cerca de esa intersección residencial en el lado suroeste.

En dos minutos, un agente encontró el carro deportivo con la madre y los tres niños a menos de una milla de distancia, cerca de una plaza comercial en la calle 66th y Pulaski Road.

“Estoy con la persona que dispararon”, dijo por radio el agente, y agregó. “Tengo un niño herido de bala”.

Le dijo a un despachador: “Voy a llevar al niño a Christ Hospital. Necesito que alguien vaya con el carro en la 66th y Pulaski”.

Otro agente dijo por radio: “Hay otros niños en el carro”.

El sonido de los llantos de los niños se oía en el fondo.

En Marquette, donde la policía determinó que se produjeron los disparos, los agentes encontraron cristales rotos en el cruce de la avenida Kenneth y agujeros de bala en la ventana de una casa cercana, según los despachos de radio de la policía.

“Dicen que fue una pelea en la carretera”, dijo otro oficial por radio. “Y un Mustang rojo estuvo involucrado”.

En la conferencia de prensa de la policía del sábado, Andrew Holmes, un activista de la comunidad, ofreció una recompensa de $7,000 por información sobre el tiroteo. El dinero para la recompensa proviene de la Fundación Andrew Holmes, Taste for the Homeless y el reverendo Michael Pfleger.

“El público puede ayudar a resolver esto. Si vieron algo, saben algo, por favor den cualquier información”, dijo Holmes. “Tenemos que sacar a estos asesinos de bebés de las calles”.

Al menos 284 niños han sido baleados en Chicago este año, según un recuento del Chicago Sun-Times. Cuarenta y tres de esas víctimas de 17 años o menos fueron asesinadas. Ha habido 33 víctimas de disparos de 12 años o menos, y seis de ellas murieron.

La más joven, Cecilia Thomas, de 5 meses, recibió un disparo en la cabeza en South Shore en junio.

Entre los otros niños muertos en Chicago este año, Melissa Ortega, de 8 años, fue alcanzada por una bala perdida en enero en La Villita. Devin McGregor, de 5 años, murió días después de un tiroteo en Rogers Park en agosto. En el lado sur, dos niños de 12 años han sido asesinados: Marcell Wilson en enero, y Nyzireya Moore en marzo.

Contribuyendo: Cindy Hernández

The Latest
Rome Odunze can keep the group chat saved in his phone for a while longer.
“What’s there to duck?” he responded when asked about the pressure he’ll be under in Chicago.
Not a dollar of taxpayer money went to the renovation of Wrigley Field and its current reinvigorated neighborhood, one reader points out.
The infamous rat hole is in search of a new home, the Chicago Bears release an ambitious plan for their new stadium, and butterfly sculptures take over the grounds of the Peggy Notebaert Museum.
Hundreds of protesters from the University of Chicago, the School of the Art Institute of Chicago, Columbia College Chicago and Roosevelt University rallied in support of people living in Gaza.