Joven que mataron en Millenium Park tenía un futuro en la música

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A los 16, Seandell Holliday tenía grandes planes por delante: quería mantener a su familia y, siendo baterista, quería hacer su propia música y abrir un estudio.

“Si llego a los 21”, él mismo escribió en una lista de metas que elaboró para una clase de tutoría en Gary Comer College Prep en el lado sur.

“Le pregunté, ‘¿Por qué pusiste eso?’”, dijo el maestro de la clase, Vondale Singleton. “Dijo que porque hay muchas cosas que suceden en Chicago, ves a tantos niños que pierden la vida a edades tempranas... Él ni siquiera pudo llegar a los 17”.

Seandell recibió un disparo en el pecho durante una escena caótica en Millennium Park alrededor de las 7:30 p.m. el sábado. El video lo muestra sangrando en el suelo cerca de la escultura de “el frijol”, mientras otros adolescentes gritaban y pasaban corriendo junto a él. Fue declarado muerto en el Lurie Children’s Hospital, a una milla y media de distancia.

Un joven de 17 años, Marion Richardson, fue arrestado cuando huía de la escena y dejó caer un arma de la cintura. Richardson llegó al parque con una niña y comenzó a discutir con alguien de otro grupo que lo reconoció de un “altercado” en una reunión masiva anterior, dijo un fiscal en la corte el lunes.

Richardson se peleó con una niña de ese grupo y, mientras intentaban alejarlo, Seandell saltó sobre él por detrás y le dio un puñetazo en la cabeza, dijeron los fiscales. Otro niño se acercó y golpeó a Richardson, quien sacó un arma y le disparó a Seandell una vez en el pecho.

Richardson fue arrestado en el césped de Millennium Park por oficiales que estaban cerca.

Un juez ordenó que lo detuvieran con una fianza de $250,000 por un cargo de asesinato en segundo grado.

La alcaldesa Lori Lightfoot respondió al asesinato de Seandell, y a las multitudes de adolescentes que peleaban entre sí, al prohibir la entrada de menores al Millennium Park los fines de semana a menos que estuvieran acompañados por un adulto.

Seandell era un estudiante de primer año de secundaria, “un niño bastante tranquilo, muy inteligente, siempre ingenioso... De diálogo profundo. Sabía que tenía mucho dentro”, dijo Singleton.

El adolescente pasó gran parte del año pasado en la clase Champs Male Mentoring, con Singleton como maestro y mentor. Singleton dijo que Seandell lo ayudó a madurar como mentor.

Singleton dijo que habló con la madre de Seandell el domingo. “Ella dijo: ‘La única vez que lo dejo salir, lo matan. Él no sale a la calle. Él nunca sale a la calle. Y la única vez que sale, lo matan’”.

El lunes, Singleton dijo que los compañeros de clase de Seandell están “desconsolados”.