Una iglesia centenaria de Pilsen, que ha estado en el centro de una lucha prolongada entre ex feligreses y la Arquidiócesis de Chicago, tendrá una audiencia especial el lunes para determinar si la Municipalidad debe salvarla.
La iglesia San Adalberto, con sus torres de 185 pies, han estado en el vecindario desde su construcción a principios del siglo XX, pero su futuro ha sido incierto desde que se celebró la última misa en 2019.
El jueves, la Comisión de Monumentos Históricos de Chicago, que considerará una recomendación histórica preliminar para la iglesia, una medida que, según los conservacionistas, asegurará su futuro.
Los conservacionistas, que incluyen desde antiguos feligreses y entusiastas de la arquitectura hasta historiadores de la cultura polaca, ven el edificio como un ícono del vecindario de Pilsen y de la comunidad polaca en Chicago.
Los partidarios de la preservación realizaron una conferencia de prensa en el Ayuntamiento el jueves para protestar la remoción de las ventanas originales y en apoyo de asignar el estatus de preservación.
“San Adalberto es un sitio estable e icónico en el distrito 25”, dijo el concejal local, Byron Sigcho-López.
El concejal ha luchado por la preservación del edificio y convocó la conferencia de prensa. Es un “tesoro para nuestra comunidad”, dijo.
Según la Comisión de Monumentos Históricos de Chicago, el sitio cumplió con varios criterios descritos en el Código Municipal para la creación de lugares emblemáticos, incluyendo “su ubicación única o apariencia física distintiva o presencia que representa una característica visual establecida y familiar de un vecindario, comunidad o la Ciudad de Chicago.”
También habló Ward Miller, presidente de Preservation Chicago, y otro defensor de mucho tiempo. “Si queremos ser una ciudad de primera clase, tenemos que honrar y proteger nuestros edificios”, dijo Miller.
Miller le había dicho previamente al Sun-Times que la eliminación de los elementos valiosos de un sitio es la forma en que la arquidiócesis ha señalado una demolición en el pasado.
Durante una lucha por la remoción de una estatua querida, le dijo al Sun-Times: “Una vez que sale la estatua, entra la bola de demolición”.
Michael Loria es reportero del Chicago Sun-Times a través de Report for America, un programa de periodismo sin fines de lucro que tiene como objetivo reforzar la cobertura del periódico de las comunidades en los lados sur y oeste.